La inquietante atmósfera de Nueva York
- El cielo naranja revela la presencia perturbadora del humo proveniente de Canadá
Las inquietantes imágenes del cielo de Nueva York teñido de un tono naranja han dejado perplejos a los espectadores de todo el mundo. Los rascacielos más emblemáticos de la ciudad se vieron envueltos en una niebla sombría que despertó preocupación entre los residentes y trabajadores neoyorquinos.
"El cielo adquirió una tonalidad amarillenta que no parecía natural, y luego se oscureció", comentó Anthony Galasso, supervisor de edificios en el Bronx, en una entrevista con la BBC. Incluso los lugareños, acostumbrados a levantar la mirada hacia los rascacielos, no pudieron resistirse a contemplar este inusual espectáculo que se desarrollaba sobre sus cabezas.
Para muchos, fue una oportunidad para capturar una versión diferente de una de las ciudades más fotografiadas del mundo. Los neoyorquinos y turistas por igual aprovecharon para inmortalizar la extraña atmósfera que se cernía sobre ellos.
Mientras los bomberos canadienses luchan por controlar más de 400 incendios forestales que han surgido en todo el país, el humo se ha extendido hacia el este, afectando a Norteamérica. Las autoridades de Nueva York han emitido advertencias sobre posibles riesgos para la salud debido a la mala calidad del aire que se respira.
La visibilidad reducida ha causado retrasos en cientos de vuelos en Estados Unidos durante la mañana del jueves. Se estima que alrededor de 100 millones de personas en América del Norte están en peligro debido a los posibles efectos de esta nube de humo.
Los expertos explican que una primavera más cálida y seca de lo habitual en Canadá ha propiciado el aumento de los incendios forestales. Se prevé que estas condiciones persistan a lo largo de todo el verano, lo que podría agravar la situación.
A medida que la nube de humo sigue su avance, la incertidumbre se cierne sobre las ciudades afectadas. Las autoridades y los ciudadanos están atentos a las actualizaciones sobre la calidad del aire y tomando precauciones para minimizar los riesgos asociados con esta inusual situación.
Se ve como el apocalipsis.
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